CARMEN ZUAZU LÓPEZ.

No sabes todo lo que vale el tiempo hasta que sientes que no te queda nada. Sientes que todo pasa más deprisa que de costumbre,  y no quieres que llegue ese momento de decir "Te echaremos de menos" o "Adiós".
 Sinceramente, la primera vez que la vi hace ya cuatro años, me dio una impresión distinta, con su inocente carita y su flequillo recto, parecía buena y todo. Pero, como se suele decir, las apariencias engañan.
Cuatro años dan para mucho. Cuatro años en los que esta chica me ha dado tantas sonrisas, tantos buenos ratos y clases de mates no tan aburridas como de costumbre. Llevamos desde primero juntas, en la misma clase. Va a ser raro no estar a su lado el resto del instituto.
Comenzando por las tardes en La Navata, muertas de frío y con el garaje del Supercor como refugio acompañadas de patatas, donetes y doritos sin sabor. Esos tiempos quedaron atrás. En ese parquecito, qué recuerdos. Las cosas han cambiado mucho.
Esas horas en El Toril, el chino y el sapo se han convertido en una tradición que este año no va a compartir con  nosotras. Quedar en la plaza a tal hora, y que ella se presente media hora tarde, voy a echar de menos esperarla. 
Ella, con sus días malos en los que va diciendo a la gente todo lo que piensa a la cara sin cortarse un pelo. Con sus castigos sin sentido que suele tener y le toca pasarse sus tardes en casa.
Desde primero hasta ahora hemos hecho muchas cosas, hemos avanzado y cambiado, para bien obviamente. Cada vez que lo he necesitado me ha sacado una sonrisa, por muy de bajón que estuviera, aunque ella no se diera cuenta, ayudaba mucho.
En un año pueden cambiar muchas cosas, pero sé que nosotras estaremos contando los días que quedan para volver a verla. Ese día estaremos esperándola, aquí, como siempre. Con el mismo parque de hace años, el mismo Toril en el que pasaremos tardes y las mismas amigas que va a dejar aquí, en Madrid.

Creo que en el fondo no me lo he llegado a creer del todo, hasta que no la vea coger ese avión que la llevará a kilómetros de nosotras. 
Este curso no va a ser el mismo, algo va a faltar.
Solo decir que la quiero mucho, que la voy a echar mucho de menos y que no va a ser lo mismo sin ti. No nos olvides, Calima.
Te quiero.
Andreew.