Padres solo hay dos, no los desaproveches.

Siempre están ahí cuándo estás triste, cuándo necesitas ayuda y nadie te quiere escuchar. Incluso están para discutir contigo. Te miman, te cuidan, te enseñan, te respetan. Son las personas que más te valoran y confían en ti. No sé qué pensaréis vosotros, pero están por encima de cualquier cosa. 

Puede que te obligan a comerte las verduras, a recoger tu habitación, a hacer la cama, a limpiar, a hacer los deberes. Y yo ahora pienso ¿Tanto nos cuesta? después de todo lo que ellos hacen por nosotros, cuatro cosas que nos piden y muchas veces nos quejamos. Párate a pensar, ¿no somos un poco egoístas?

Hay gente que dice "Son unos cabrones", les contradigo. No entiendo como hay personas que pueden odiar a las dos personas que te han dado la vida, te han enseñado a ser quién eres, que te han dado casa, comida y cariño y, por encima de todo, felicidad. Esa felicidad que te entraba de pequeño cuando tus padres te compraban un juguete por sacar buenas notas, que te llevaban al parque los días más calurosos o más fríos del año, que se despertaban a las tantas de la madrugada el día de reyes para dejar los regalos en el salón y que tú no perdieras la ilusión. Aguantan cada una de las broncas, cada uno de los portazos, cada mala cara y cada berrinche. 

Solo puedo decir una cosa, aunque se queda corta, y es GRACIAS. Gracias por quererme siempre.